Los
resultados de un estudio de cuatro años publicados en la revista
científica Ecosystem Services (Servicios Ecosistémicos) éste mes han
revelado que los bosques de niebla son responsables de filtrar cerca de
la mitad del agua superficial disponible en las cuencas de represas
tropicales, a pesar de solo ocupar un 4.4% del área de éstas cuencas, a
lo largo de los trópicos.
Los
datos que ofrecen contexto a la importancia relativa de los bosques de
niebla para los almacenamientos de agua dulce, producción de energía y
la salud de la biodiversidad, suministran a administradores ambientales y
tomadores de decisiones con información crítica que puede ser usada
para evaluar el alto valor económico y ecológico de los servicios que
los bosques de niebla prestan para garantizar sociedades saludables,
estables y sostenibles. El estudio además ayudará a definir áreas
prioritarias de conservación dentro de las cuencas de embalses buscando
optimizar los beneficios naturales de los bosques de niebla así como el
desempeño de la infraestructura de represas y amblases.
En
conjunto, un equipo de científicos de Conservación Internacional y el
King’s College de Londres mapearon la ubicación de más de 20,000
embalses a lo largo de los trópicos en Africa, Asia, Australia, América
Central y Sur América, como parte de la base de datos de embalses
tropicales del King’s College de Londres (King’s College London Tropical
Database of Dams – KCL – TDD por sus siglas en Inglés), incluyendo
pequeños embalses que nunca antes habían sido mapeados.
Estos
pequeños embalses, concluyen los investigadores, son claves para el
suministro de agua a nivel rural así como para el desarrollo de
proyectos de generación de pequeña escala, que por desarrollarse en
infrastructura existente tienen mínimo o no impacto sobre el medio
ambiente. La incorporación de embalses grandes y pequeños hacen de dicha
base de datos el más detallado censo geo-referenciado de represas
tropicales de la actualidad.
“El
volumen de agua que los bosques de niebla son capaces de filtrar
muestra que su conservación puede ser parte de una estrategia
inteligente de bajo costo y alto beneficio para mejorar el desempeño de
represas” dice el autor líder del estudio Dr. Leonardo Sáenz, Director
de Eco-hidrología de Conservación Internacional. “Demostrar el valor que
los bosques de niebla, en términos de los importantes servicios
ecosistémicos que suministran, es fundamental para crear los incentivos y
señales de mercado reales que son necesarios para prevenir su
deforestación y asegurar su restauración”.
Como
ecosistéma multifuncional, los bosques de niebla generan una variedad
de beneficios de capital natural en los países o regiones donde aún se
encuentran, suministrando agua dulce de alta calidad, capturando y
almacenando carbono atmosférico y soportando una amplia y rica
biodiversidad. Por ejemplo: aunque varían de continente a continente,
los bosques de niebla son de los lugares más ricos en diversidad de
flora, anfibios, aves, reptiles y albergan especies amenazadas tales
como el Oso de Anteojos de los Andes (Tremarctos por su nombre
científico) y el Tapir de Montaña.
Al
mismo tiempo, los bosques de niebla son de los ecosistemas más
amenazados del planeta debido al cambio climático, deforestación y
conversión a pastos, lo que hace que el mundo haya perdido a la fecha un
estimado del 55% de los bosques de niebla originales, lo cual
corresponde a alrededor de 2.7 millones de kilómetros cuadrados – un
area similar al tamaño de Argentina.
“La
relación que los bosques de niebla tienen con las represas tropicales
es importante porque 41% de la extensión global de bosques de niebla se
encuentra dentro de las cuencas alimentadoras de sus reservorios” dice
Dr. Sáenz. “Si estos bosques se degradaran aún más también lo haría el
desempeño de dicha infraestructura”.
Esto
es porque la pérdida de bosques de niebla puede ser muy dañina para la
operación de represas. Su pérdida puede incrementar significativamente
la sedimentación de reservorios y acelerar el daño de turbinas, lo cual
puede reducir el desempeño económico. Esto es grave además pues las
represas existentes – particularmente en áreas tropicales – son
fundamentales para el suministro de agua potable, irrigación de
cultivos, control de inundaciones y la generación de energía
hidroeléctrica. Un estudio en la misma línea por Dr. Sáenz, que explora y
discute como la pérdida del bosque de niebla puede reducir el desempeño
económico de represas de generación va a ser publicado al final de la
primavera.
Dr.
Mark Mulligan del King’s College de Londres y co-autor dice, “En un
futuro, reconociendo que el suministro de agua a las represas es desde
sus cuencas aguas arriba y facilitando un mejor apoyo a las comunidades
marginales – y a menudo pobres – que se ubican en estas áreas altamente
pendientes de las montañas tropicales, se podría diversificar las
actividades económicas en éstas zonas, aliviar pobreza, y reducir la
presión agrícola existente sobre los fragmentos de bosque de niebla que
aun existen y al mismo tiempo mejorar las oportunidades para que las
inversiones en este tipo de infraestructura sean realmente costo
efectivas ”.
“La
protección de bosques de niebla puede ser una muy eficiente y
productiva solución en términos de infraestructura natural para mejorar
la efectividad de represas” dice Dr. Fabio Arjona, Director Ejecutivo de
Conservación Internacional en Colombia. De acuerdo al estudio Colombia
tiene más de 170 represas entre grandes y pequeñas, de las cuales solo
cerca de 10% son dedicadas a generar hidroelectricidad, y un estimado de
20,150 kilómetros cuadrados de bosques de niebla aguas arriba de éstas
represas. “Estos resultados podrían ayudar países como Colombia
optimizar sus actuales 10 gigawatt de capacidad de generación de
hidroeléctrica instalada y producir más firmeza a través de la
protección y restauración de bosques de niebla críticos.
“A
través de una ciencia sólida y de colaboración estratégica, CI está
trabajando para crear un nuevo paradigma de desarrollo que pone el valor
de la naturaleza en el centro de la toma de decisiones, respetando la
naturaleza y dando a conocer el real valor de la naturaleza y sus
valiosos servicios ecosistémicos sobre los cuales las personas – a
menudo los pobres – dependen” dice Sáenz. “Estamos alcanzando un momento
en el cual no tenemos que escoger más entre las percepciones
encontradas sobre las necesidades de la naturaleza versus las
necesidades de la gente. Estas no son mutuamente excluyentes, y de
hecho, deben ser conjuntamente consideradas buscando crear y mantener
sociedades, saludables, estables y duraderas”
Artículo de Leonardo Sáenz
Fuente: Conservación Internacional
Tomado de: infoandina.org
No hay comentarios:
Publicar un comentario